“Escribir tu nombre es privilegio”: ‘Un amor español’ de Luna Miguel

La poeta nos muestra una visión periférica de su sentir, su biblioteca y por tanto de su poética, que no es más que la captura detenida del presente

Dalia Alonso
Papel en Blanco
Published in
3 min readApr 5, 2023

--

Luna Miguel fotografiada junto a sus libros. Imagen de Laura Rosal/Lumen.

La prolífica autora madrileña Luna Miguel, diestra en los cuatro grandes géneros (poesía, narrativa, ensayo y teatro), publica en La Bella Varsovia su último poemario, Un amor español. Se trata un homenaje experimental a las autoras sáficas que acaba resultando en un auténtico manual de lecturas y deseo.

Sirviéndose del formato epistolar -más en la primera parte que en las dos últimas, pero siempre dirigiendo sus versos a una segunda persona del singular-, la poeta canaliza los diversos temas a través de la narración de una relación heterosexual que podríamos tildar de enfermiza o, al menos, complicada. Con el constante miedo al final y la consciencia del carpe diem, Luna Miguel equipara su amor con la vida del lirio: será lo más bello mientras dure, aunque no dure siempre, y es eso precisamente lo que garantiza su fuerza y su permanencia. En referencia a los versos de Safo a propósito de la palidez de la hierba, la poeta dice “narrar el deseo de otro tiempo es confirmar su permanencia / […] / querido mío/ de guardar las flores de tu jardín/ entre las páginas de mis cuadernos/ he aprendido que ninguna es capaz de soportar/ su color primigenio y eso me encanta/ porque cuando la flor resiste entre las hojas/ en las que escribo tu nombre/ una nueva belleza explota/ es preferible la palidez de sus pétalos/ ahora eternos contra la página/ que la frescura ínfima de estar todavía viva”.

Cubierta de ‘Un amor español’ (La Bella Varsovia, 2023)

Menciono la referencia a Safo, pero es inevitable hablar de Un amor español sin hablar de todas las citas, directas o indirectas, de las referencias que abundan en el poemario y que forman parte fundamental de él. H.D., Carmen Conde, Delibes, Aldington… Son muchos los nombres de libros y autores que aparecen en él, y en varias ocasiones la autora habla en el poema del puro acto de la lectura y su relación con el deseo y el amor (“querido mío/ escribir tu nombre es privilegio/ si digo tu nombre/ si te escribo es para que nadie olvide/ el gozo que sentimos aquel verano/ al buscar en los diarios de escritoras muertas/ un motivo para desnudarnos en tu cama”).

Bajo de los libros y la conversación sobre el deseo, el romance que Luna Miguel quiere narrar y que se nos muestra de manera casi plástica, con numerosos versos que hablan del amado y de su relación con él, tanto en el plano sexual como en el meramente espacial (“finjo así presencia/ cuido de nuestro ambiente/ sacio en el paisaje/ un ansia de varón”).

Un poemario, en definitiva, muy personal, intimista pero expuesto, en el que la poeta nos muestra una visión periférica de su sentir, su biblioteca y por tanto de su poética, que no es más que la captura detenida del presente. En sus palabras: “Ni planes ni recuerdos solamente la presencia/ era el material perfecto/ para la empresa lírica/ según Chacel/ ¿sabes?/ ahora que aún me ocurres/ seduzco el hábito/ espío algunas pasiones/ y estudio cómo ser”.

Puedes hacerte con tu libro a través de nuestros enlaces, y así nos ayudas a seguir adelante, o en tu librería de confianza.

También te puede interesar:

Papel en Blanco necesita tu apoyo para seguir adelante. Échanos una propia en:

https://ko-fi.com/papelenblanco

--

--