Scorched: ¿Los Vengadores de Image?
‘Scorched’ son Los Vengadores (chamuscados) del universo de Todd McFarlane
Todd McFarlane continúa innovando y poniendo patas arriba el particular mundo de Spawn, el héroe chamuscado por excelencia. No, lamentablemente, no vamos a escribir ni una sola línea en torno a Los Vengadores de Marvel, pero sí del homólogo bizarro que tiene el supergrupo, en Image, a día de hoy.
No sé si en los 90 nos podríamos haber imaginado que Spawn tendría un papel tan relevante en Image, o en su propia colección, pero así está el panorama en la actualidad. Al Simmons tiene para dar y repartir a quien se le ponga por delante y su evolución, como superhéroe renegado, le ha llevado a alcanzar un nivel de poder que nadie había visto venir. Es tal la relevancia que tiene Spawn en la actualidad, que él solito decide organizar un grupo que gire alrededor de sus congéneres y esos son, sin lugar a dudas, los chamuscados.
She-Spawn, Medieval Spawn, Gunslinger y Redeemer son los miembros de este equipo disfuncional que se erige en torno a la figura de Al Simmons, el líder del equipo y la persona sobre la que recae la responsabilidad de mantener a raya a esta panda de inadaptados. Si leer un cómic de Spawn produce de por sí cierta nostalgia, que salga Medieval Spawn acrecienta la sensación aún más, ¿o es que soy el único que recuerda aquellas grapas en las que el engendro cruzaba su camino con el de Witchblade?
Los Engendros Infernales nunca estuvieron destinados a trabajar juntos. Ese tipo de poder es demasiado volátil, demasiado peligroso. Sin embargo, los Scorched no tienen otra opción. Engendros Infernales y Ángeles trabajan juntos para salvar a la humanidad de aquellos que pretenden esclavizarla. She-Spawn, Redeemer, Medieval, Gunslinger y Reaper.
En este primer volumen, que de toda la nueva camada de cómics de Spawn ha sido el que más he disfrutado, se nos cuenta el origen del grupo y la primera misión que tiene que cumplir de The Scorched en suelo ruso. La importancia de Al Simmons también queda patente, desde las primeras páginas, y no parece tener un solo rival que esté a la altura de su renovada fuerza. El grupo está formado por viejos conocidos de su universo, personajes que pertenecen a otras épocas y que ansían volver a su tiempo, sea como sea.
Del grupo hay que destacar el rol que adquiere She-Spawn, un personaje completamente renacido y que, según parece, será fundamental en esta nueva etapa de la franquicia de Todd McFarlane. Quizá, por otro lado, uno de los personajes más desaprovechados sea Redeemer, relegado a un papel más secundario, cuya función, en estos cómics, parece ser la de solo cumplir la papeleta de superhéroe que da apoyo aéreo, por eso de que tiene alas. Por instantes, me ha recordado al papel del Ángel en los primeros números de la Patrulla-X de Jack Kirby y Stan Lee. Ojalá su situación cambie, porque era uno de mis personajes favoritos de la colección. A Gunslinger se le ha traído aquí para ser el personaje que tenga que gustar a todos y así lo hace: es violento, fuma, es vengativo y lleva dos pistolones. Sin embargo, no han sabido dar en la tecla para tratar a Medieval Spawn, que era una de mis grandes apuestas para este grupo. La nueva encarnación del personaje, que se convierte en Spawn cuando se coloca el yelmo del engendro, no tiene el mismo carisma que el Spawn que todos recordábamos. Aún y todo, los personajes saben interactuar correctamente entre ellos y funcionan como equipo, potenciados, eso sí, por la sensación de miedo y respeto que provoca la presencia de Al Simmons entre todos ellos.
En resumidas cuentas, hay que seguir de cerca a estos chamuscados, que tienen mucho que darnos aún. Violencia, escenas bizarras, conspiraciones políticas, lobos, balas, llamas y demonios por doquier, ¿qué más ingredientes hacen falta para acercarse a Scorched?
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