‘RUR’, el amanecer de los robots
Katerina Cupova adapta al pionero de la ciencia ficción distópica Karel Čapek
Karel Čapek (1890–1938) fue un autor checo y uno de los pioneros en la literatura europea de ciencia ficción. Una de sus obras más conocidas, y que tiene varias ediciones en español (como esta espléndida de Libros del Zorro Rojo), es La guerra de las salamandras (1936), obra que se suele encuadrar en el género por su carácter distópico y que se ha leído como una sátira sobre el nazismo. Pero mucho antes, en 1921, Čapek había escrito una obra de teatro, RUR, donde acuña el término robot y en el que nos previene de las consecuencias a largo plazo de la revolución sistema, la inteligencia artificial y su uso/abuso por parte del ser humano. Quedan siete años para que Fritz Lang estrene Metrópolis, ojo.
En RUR Capek describe una empresa que construye humanos artificiales orgánicos con el fin de aligerar la carga de trabajo del resto de personas. Aunque en la obra a estos hombres artificiales se les llama robots, tienen más que ver con el concepto moderno de androide o clon. Se trata de criaturas que pueden hacerse pasar por humanos y que tienen el don de poder pensar. Pese a ser creadas para ayudar a la humanidad, más adelante estas máquinas entrarán en confrontación con la sociedad, iniciando una revolución que acabará destruyendo la humanidad.
Cuando uno lee RUR, impresiona la modernidad de sus planteamientos. Una obra que cumple ya cien años resulta completamente visionaria en cuanto habla de seres indistiguibles de los humanos del ser humano, de su explotación por parte del capitalismo, del fin del trabajo y de la llegada del hombre ocioso, de la posterior toma de conciencia de los robots y de la destrucción de la humanidad. Todos los temas de la ciencia ficción moderna y del posthumanismo están ya contenidos aquí.
Katerina Cupova, por su parte, autora también checa (Oslava, 1992), en esta su primera novela gráfica, realiza una espléndida adaptación de la obra de teatro original. En su visión, la autora, que elige una estética moderna pero atemporal, que puede emparentarse con el legado de la animación checo y la sencillez de recursos del manga, amplifica la alegoría bioética de Kapek trasponiéndola a estos tiempos en que la servidumbre tecnológica tiene en jaque cuestiones como el libre albedrío, la voluntad individual y el sentido común de los hombres.
Del Frankenstein o el moderno prometeo de Mary Shellye a la rabiosa actualidad de la serie Love, Death & Robots en Netflix, toda la reflexión sobre la naturaleza del hombre y sus límites está contenida en RUR. Estamos de enhorabuena porque Katerina Cupova haya actualizado y traído a nuestras manos esta obra capital de la literatura distópica. RUR queda como uno de los mejores títulos de 2022.
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